miércoles, 13 de enero de 2010

La vida como escenario.



Nunca está todo inventado. En un festival de teatro que se celebra en Burgos estos días, “Escena Abierta”, se ha presentado un idea muy original. Cuando los burgaleses hayan ocupado los asientos del patio de butacas, suene el timbre y suba el telón, sus ojos verán una enorme pantalla. La imagen que se proyectará será la de una webcam situada en el domicilio privado de los dos actores de la obra “Felicidad.es”. El espectáculo se representará a distancia, nada menos que desde Barcelona, quizás desde el salón o tal vez en un dormitorio. La acción además será dirigida por un espectador elegido al azar que se encargará de manejar un ordenador desde el que tendrá que reproducir en el momento justo una canción, un vídeo o cargar una página web.

“Felicidad.es” trata de explorar el sentimiento de felicidad y los caminos que llevan a ella en un mundo globalizado y capitalista con grandes avances tecnológicos que, paradójicamente y según los autores, provoca grandes dosis de frustración.

No hay comentarios: